Compras en Jordania

¿Qué comprar en Jordania y dónde ir?


Dos cuestiones importantes. Qué comprar y dónde. Jordania es uno de esos viajes exóticos que no habilitan a volver con las manos vacías.

¡Regalos!

Benditos y nunca bien ponderados…

¿Dónde no comprar en Jordania?

Empecemos por el “no”. El único lugar donde no te recomendamos comprar es en el único sitio que no puedes dejar afuera de tu viaje por Jordania: Petra. Y es que al estar aislada —cientos de turistas congregados en torno a un centro arqueológico despoblado—, los precios se encarecen hasta un punto insostenible.

El regateo, como en todo Medio Oriente, es una herramienta de negociación indispensable en los mercados callejeros.

Pero ni todos los jordanos regatean, con lo cual es importante olvidar este esquema mental y percibir el verdadero valor del trabajo que ofrecen, ni aun regateando te aseguras el precio que puedes hallar por la misma artesanía en Amán, la capital.

La otra zona que no es conveniente para comprar es junto al paseo marítimo de Aqaba, donde los vendedores acomodan los precios al nivel económico de los turistas hospedados en los resorts de alrededor.

¿Dónde comprar?

Dicho esto, el centro de Aqaba es un lugar ideal para ir de compras. La ciudad, al ser un puerto franco, tiene un régimen de impuestos distinto que abarata el precio de venta.

En el centro de Amán también hay centros comerciales y puestos callejeros con una oferta vasta. Encuentras desde artesanías hasta joyas, inciensos, especias exóticas o ropa moderna o tradicional.

¿Qué comprar en Jordania?

Te recomendamos comprar algo que se relacione con el país que visitas. Algunas sugerencias:

  • Plata beduina. Las tribus del desierto comercializan con este material. Hacen brazaletes y joyas en general. Las encargadas son las mujeres, por lo que cada compra contribuye a la pequeña producción local.

Puedes adquirir artesanías de primera mano, sin intermediarios, es en el desierto de Wadi Rum.

  • Huevos de avestruz pintados con escenas bíblicas.

  • Arte bizantino. Vajilla, jarrones, cuadros y diversos productos hechos con mosaicos. Representan escenas típicas del país o de su historia.


Te recomendamos buscarlos en la ciudad de los mosaicos: Madaba.

  • Un pañuelo típico. Lo usan en la cabeza y proviene de la tradición beduina. Se lo conoce como shemagh. Cada región de Jordania aplica en la tela una geometría característica.
  • Tapices con todo tipo de diseños y tramas tradicionales. El mejor lugar para encontrarlos es Amán.

  • Narguile. Un clásico de Medio Oriente. Se consigue a precios muchos más bajos que en Europa. La pipa de agua es fina, esbelta, estética. Es un excelente obsequio a un amigo, un motivo para juntarse alrededor de una mesa, o una decoración que te puede gustar para tu casa.

  • Barro del mar Muerto. Seguimos con los clásicos. Un producto con una utilidad clara. Un regalo perfecto para un/a amante de los tratamientos para la piel.

  • Tarros de arena. La tiñen de diferentes colores para conformar paisajes y decorar recipientes de cristal. Un souvenir barato y representativo.

  • Especias. Un regalo original para los que disfrutan de la buena gastronomía  y de experimentar nuevas recetas y sabores.

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